La empresa PetStar se ha posicionado como líder en reciclaje de botellas de plástico, integrando todo el proceso desde la recolección del material hasta la producción de resina. Su enfoque comienza con la compra de botellas 100% reciclables, un compromiso que se extiende a toda la empresa. Para asegurar la eficiencia en la recolección, PetStar utiliza su propia flota de transporte, que opera en todo el país y lleva los materiales a sus ocho plantas de recolección ubicadas en ciudades clave como Monterrey, Guadalajara, San Luis Potosí y Mérida.
Ximena Martínez, responsable de comunicación de PetStar, explica que “nuestra flota de transporte se encarga de recoger los materiales directamente y llevarlos a nuestras instalaciones de recogida y reciclaje”. Este sistema permite clasificar las botellas antes de enviarlas a la planta de reciclaje de alimentos más grande del mundo, donde se procesa el material para su reutilización.
Obligaciones ambientales y ecodiseño
PetStar forma parte del sistema Coca-Cola, que se ha fijado ambiciosos objetivos de sostenibilidad. Se espera que para 2025 todas las botellas de Coca-Cola sean 100% reciclables y para 2030 Coca-Cola utilice al menos un 50% de material reciclado en sus productos. Martínez destaca que “trabajamos para mejorar continuamente el diseño de nuestras bolsas, priorizando bolsas que faciliten el reciclaje, como nuestras botellas transparentes Sprite”.
Este compromiso no sólo beneficia al medio ambiente, sino que también ha mejorado la calidad de vida de más de 22.000 recolectores de basura, que han encontrado en el proyecto una fuente sostenible de ingresos. La integración de estas comunidades es fundamental para el éxito del reciclaje en México, creando un ecosistema que beneficia tanto a las personas como al planeta.
Tecnología pionera en el campo del reciclaje
PetStar no escatima en implementar tecnología avanzada para optimizar el proceso de reciclaje. Se utilizan los equipos más modernos, incluida una línea de lavado AMUT de Italia y una línea de policondensación (SSP) de Buhler, Suiza. Esta combinación de tecnologías nos permite crear un proceso eficiente y efectivo para la producción de resina reciclada.
En sus instalaciones de Toluca, WIRED ha sido testigo del espectáculo del reciclaje. Una vez recogidos, los materiales nunca llegan a los centros de acopio sin haber sido previamente clasificados. El proceso comienza separando y clasificando las botellas por color y tipo. Luego se comprimen en cubos para que sean fáciles de manipular.
Mientras se descargan los contenedores, un minicargador alimenta la línea de lavado. Las botellas se someten a un prelavado para eliminar la suciedad orgánica y las etiquetas, asegurando que el material esté limpio para su uso posterior. Un sistema automatizado controla la cantidad de material que pasa a las siguientes etapas del proceso.
Eficiencia de la separación de materiales.
Uno de los aspectos más innovadores del proceso PetStar es el uso de separadores infrarrojos automáticos, que identifican la composición molecular del material. Este sistema permite separar con precisión botellas de PET, desechando envases de otros materiales como PC, PE o PS. Esto no sólo asegura la calidad del material reciclado, sino que también maximiza la eficiencia del proceso.
En conjunto, el enfoque integral de reciclaje de PetStar no sólo transforma los residuos en recursos valiosos, sino que también contribuye a un futuro más sostenible. A medida que la empresa continúa innovando y ampliando sus operaciones, su modelo se está convirtiendo en un referente en la industria del reciclaje, demostrando que es posible combinar rentabilidad con responsabilidad ambiental.