The 2024 field (minus Trump) goes through the Tucker stress test

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También ofreció el segundo puesto a Ron DeSantis y candidatos de menor rango como el Sen. Tim ScottNikki Haley y Vivek Ramaswamy una apertura para realizar más incursiones en Iowa.

Carlson, que ahora presenta su propio programa en Twitter, dio tiempo a los candidatos para hablar del aborto, uno de los temas más frecuentes para The Family Leader. Pero utilizó principalmente su pértiga para presionar a los candidatos sobre temas importantes para él: es decir, el papel de Estados Unidos en la guerra en curso en Ucrania.

Y salvó a la mayor parte de su animo para el exvicepresidente Mike Pence.

En la entrevista más polémica del día, Carlson se encajó con el candidato desfavorecido por su posición en la guerra y sus acciones el 6 de enero de 2021, cuando los partidarios de Trump asaltaron al Capitolio de Estados Unidos y pidieron colgar Pence para certificar los resultados de 2020. elecciones presidenciales.

Carlson, un feroz defensor de Trump que después amargó al expresidente, desafió, interrumpió y contradijo al suave Pence casi en todo momento. Como resultado, el devoto candidato cristiano se enfrentó a la hostilidad y las burlas en una cumbre que antes le habría proporcionado un público amable.

“Nunca he utilizado la palabra insurrección, Tucker”, dijo Pence cuando le preguntaron si estaba de acuerdo con ese término. Calificó el 6 de enero de “día trágico” y “de un motín que tuvo lugar en el Capitolio” e intentó encontrar un punto medio advirtiendo la violencia de los manifestantes así como el tiroteo mortal del defensor de Trump Ashli ​​Babbitt por parte de un agente de policía. .

“Siempre creeré que, por la gracia de Dios, cumplí mi deber ese día según la Constitución de Estados Unidos de América, y nuestras instituciones lo mantuvieron”, dijo Pence entre unos tébidos aplausos, y luego dijo que estaba “enfurecido” por cómo el Capitolio. se atendieron a los agentes del edificio ya las fuerzas del orden.

Pence intentó criticar las manifestaciones de Black Lives Matter, pero Carlson le hizo aún más duro sobre el tema de Ucrania. Insistió en que Pence no se toma suficientemente en serio la afirmación de Carlson de que el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy “ha atacado conventos, ha arrestado a sacerdotes, ha prohibido efectivamente la denominación cristiana de la Iglesia ortodoxa ucraniana en Ucrania, ha perseguido a los cristianos”.

Pence dijo que planteó estos problemas con un líder religioso durante una reciente visita a Kiev y estuvo “asegurado” que el gobierno ucraniano estaba “respetando la libertad religiosa”.

Carlson se mostró impasible. “Me pregunto sinceramente cómo un líder cristiano podría apoyar la detención de cristianos por tener opiniones distintas”, dijo.

El intercambio acalorado continuó durante la entrevista de 25 minutos, con Pence pió más tarde que sus observaciones se sacaron de contexto. Un portavoz de Pence se negó a comentar más sobre el intercambio.

La tensión de ida y vuelta subrayó tanto la dificultad de Pence en la carrera como el cambio en curso en el Partido Republicano, cuyos tradicionalistas creen que Estados Unidos debería defender a Ucrania y alejarse de la influencia de Trump.

Pero está claro que la influencia ha llegado para quedarse.

“Tucker Carlson es bueno en lo que hace. Creo que algunas de las respuestas de Pence: ¿que un vicepresidente reciba abucheos, abucheos audibles del público? Esto es un gran problema”, dijo Mike Demastus, pastor de la Iglesia de Cristo de Fort Des Moines, después del evento. “Incluso oí a un pastor amigo mío decir: ‘Su campaña ha terminado'”.

Mientras varios miembros del público aplaudieron el estilo de Carlson y se centraron en la guerra, los republicanos del establishment expresaron la consternación.

“Los republicanos vivirán para arrepentirse de tratar a Tucker Carlson como abanderado del GOP. En casi todos los temas de consecuencias, está muy fuera de la corriente principal: desde blanquear 1/6 hasta defender la desinformación pro-Kremlin, está más que equivocado y nos costará en las urnas”. tuiteó al antiguo empleado de Trump y copresentadora de “The View” Alyssa Farah Griffin.

Mientras, varios candidatos se mantuvieron en la longitud de onda de Carlson y gozaron de entrevistas mucho más amables.

DeSantis y Ramaswamy, que culparon al 6 de enero de la ira que sintió la gente por lo que describió como “censura generalizada en este país”, parecían apaciguar a Carlson al estar de acuerdo en general con su posición sobre la guerra de Ucrania.

Algunos del público pensaron que la configuración era especialmente dura para algunos candidatos, como Pence y el antiguo gobernador de Arkansas Asa Hutchinson.

“Me imagino que al vicepresidente Pence le hubiera gustado hablar más sobre su historial en la defensa de la vida no nacida”, dijo Chris Hagenow, presidente de Iowans for Tax Relief y antiguo legislador estatal. “Sin duda, hubo un conjunto de preguntas en las que dedicó la mayor parte de su tiempo a las que probablemente le hubiera gustado salir más rápidamente”.

By Fatiha Lema

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